Habiendo transcurrido unos días del cambio de Gobierno lo que nos permite adquirir distancia y tras estudiar las opiniones de los diferentes grupos políticos, desde la Confederación Vallisoletana de Empresarios entendemos que es el momento de retomar, sin apasionamiento, el debate sobre un asunto crucial para el desarrollo de la ciudad para los próximos años, muchos años, como es el soterramiento total o parcial de las vías del tren a su paso por el centro de la ciudad.
CVE constituyó el 30 de julio de 2015 con la participación de los principales actores de la sociedad civil vallisoletana el Foro Abierto “Valladolid Ciudad de Futuro”, como una institución útil para procurar el máximo acercamiento de la Sociedad Civil de Valladolid al Ayuntamiento de esta ciudad, a través de los diversos colectivos representados en el Foro, en el convencimiento de que las propuestas que están recogidas en el documento final no fueran a pasar inadvertidas a los máximos dirigentes políticos del Ayuntamiento.
Entre las conclusiones que están recogidas en el documento final que se adjunta, figuran las siguientes relacionadas con el Soterramiento en Valladolid:
- El AVE ya ha llegado, y aunque ello no ha trasformado la ciudad, si es cierto que ha cambiado los hábitos de muchos ciudadanos. Ahora lo que falta es el soterramiento de las vías, con todo lo que ello significa desde el punto de vista urbanístico, pero sobre todo, desde el punto de vista de la mejora de la calidad de vida de la mayor parte de los vecinos de la ciudad.
- Debería ser un objetivo estratégico de la Ciudad para la primera mitad del Siglo XXI, el cambio y las oportunidades que ello traerían a la ciudad son inimaginables. Las crisis pasan, pero las oportunidades también, y ésta no la podemos dejar escapar.
- La línea férrea debería ir en trinchera, semi-trinchera o soterrado, al menos, desde el sur, a la altura de la Ronda Exterior, hasta el norte, a la altura de la Ronda Interior.
- Es cierto que la ciudad tiene una serie de debilidades y amenazas: (decrecimiento de la población, fuga de capital humano, falta de espíritu emprendedor, industria monocultivo en torno al automóvil, inexistencia del área metropolitana, etc.) pero también tiene una serie de fortalezas y oportunidades (está muy bien situada en el noroeste español, tiene buenos servicios municipales, dotaciones públicas de proximidad, dos universidades, buenas conexiones, gran potencial cultural y técnico, etc.).
Además, con posterioridad, el 16 de febrero de 2017 remitimos una carta al alcalde de Valladolid con la posición de CVE sobre este asunto con el siguiente literal:
Dada la trascendencia de la reunión en la que hoy vas a participar como miembro de la Junta General de Valladolid Alta Velocidad 2003, S.A., y dada la repercusión que para el futuro de Valladolid va a tener la decisión que ahí se adopte, desde la Confederación Vallisoletana de Empresarios CVE queremos hacer llegar nuestro posicionamiento acerca del soterramiento en Valladolid.
Entendemos que el traslado a los nuevos talleres de Renfe y por lo tanto los mil puestos de trabajo que éstos pueden generar en Valladolid, es ya una realidad que se materializará de forma inminente, pero al mismo tiempo nos negamos a asumir el estancamiento que a largo plazo supondrá para Valladolid una integración del ferrocarril en superficie condenando para siempre la posibilidad de soterrar.
De las diferentes alternativas que a día de hoy conocemos a través de las informaciones que han sido vertidas a los medios de comunicación, así como de las recogidas de las diferentes reuniones que hemos mantenido con distintos representantes del Ayuntamiento, entendemos que la opción más razonable es la del soterramiento parcial.
Considerando completamente inviable la opción inicial del soterramiento, si bien es cierto, todos los días amanecemos con más cifras, cifras nuevas y datos diferentes que dificultan el poder hacerse una idea clara del proyecto, también descartamos la opción de la integración en superficie.
Recogiendo las palabras del Concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, en relación a esta inviabilidad del soterramiento integral, consideramos que efectivamente hay que ser prácticos y agarrarse a lo que es posible y viable, y añadimos que el proyecto de soterramiento parcial es posible y viable a medio y largo plazo, por lo tanto, no debemos dejar pasar esta oportunidad.
Con esta alternativa, al soterrar desde la Calle Eslava hasta Arco de Ladrillo, de los terrenos liberados por el traslado de los antiguos talleres y por el soterramiento de la vía se obtendrían importantes fondos para financiar el segundo tramo comprendido entre la Calle Labradores y la Plaza de Rafael Cano.
Debemos considerar esta opción como un proyecto de ciudad a largo plazo que va a acabar con los vecinos de primera y de segunda categoría, va a dar respuesta a una demanda colectiva de toda la sociedad civil vallisoletana, va a mejorar de forma sustancial la movilidad y la permeabilidad en Valladolid, va a generar importantes inversiones y puestos de trabajo durante la ejecución de las obras y que por lo tanto es merecedor una importante inversión por parte del Ayuntamiento de Valladolid.
La vía supone una barrera física que altera el urbanismo de la ciudad, eliminar las vías eliminaría la barrera y eliminaría la alteración del urbanismo en Valladolid.
ADIF va a aportar el grueso de la financiación del proyecto, esto es 210 millones de euros, se haga en superficie o se haga soterrado, y superado el apalancamiento financiero de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad, no desaprovechemos esta inversión en un proyecto de integración en superficie que no daría respuesta a las demandas de los vecinos de Valladolid y condenaría el no sólo el soterramiento de las vías para siempre sino que también, la integración de la vida en Valladolid y la generación de los recursos que supondría la liberación de la totalidad de los terrenos y el soterramiento de la vía.
Además, dado que ésta es una de las propuestas del Ministerio de Fomento, contaría con su correspondiente plan de viabilidad, por lo que el problema que pudiera suponer las limitaciones de la Ley de Estabilidad Presupuestaria sobre el techo del gasto del Ayuntamiento, queda solventado.
Esta postura, también se la hemos hecho llegar al Consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León, en la confianza de que en la reunión que vais a mantener en unas horas, sea tenida en consideración antes de tomar cualquier decisión que vaya a comprometer el futuro de los vecinos de Valladolid.
Por todo ello, desde la Confederación Vallisoletana de Empresarios nos ofrecemos a canalizar la opinión de la sociedad civil vallisoletana sobre este asunto a través de la revitalización del Foro Abierto Valladolid Ciudad de Futuro con la participación de todos los actores de la sociedad civil de Valladolid para trasladar esta opinión al Ayuntamiento de Valladolid.
