Igualdad

Directora de Michelín España pide cambiar estereotipos inconscientes en educación niñas

Lo que ven, lo que viven en las casas y en los colegios determina lo que las niñas quieren ser de mayores, por ello la directora general de Michelin España y Portugal, María de la Paz Robina, ha abogado por cambiar y quitar “esos estereotipos inconscientes” para que su capacidad de elegir no esté predeterminada, bien sea para ser ingeniera, médica o dedicarse al ganchillo.

Así lo ha transmitido en su participación este lunes en Valladolid en el Foro “Mujeres que lideran”, organizado por la patronal CEOE de Castilla y León ante el retroceso que se ha producido en los últimos años en España a la hora de que las chicas opten por carreras científicas.

Informar desde más pequeñas y no esperar a la universidad

Para Robina, aunque se está informando a las chicas sobre esas carreras, hay que hacerlo desde pequeñas, ya que una vez que están en el paso de acceder a la universidad o estudios científicos ya es tarde.

La directora de Michelín España y Portugal, natural de Valladolid, estudió Ciencias Químicas en la Universidad vallisoletana y ha sido una mujer que ha ido rompiendo techos de cristal casi desde el inicio en los sucesivos puestos que ha ido escalando en estos 35 años en la empresa.

Su hija estudia ingeniería con naturalidad, ha detallado ante su “falta de explicaciones” sobre las causas por las que en los últimos ocho o diez años sean menos las mujeres que se dirigen a carreras de ciencias en España tras un periodo en el que el número fue en incremento.

“Vamos a probar contigo a ver cómo va esto”

Robina fue la primera mujer en ser técnico de taller en Michelín en España, en el inicio de su carrera, la primera que se puso un buzo en un momento en que los trabajos femeninos en esa empresa se reducían a oficinas o limpieza.

“Vamos a probar contigo a ver cómo va esto”, ha sido el mantra que le ha perseguido en sucesivas responsabilidades en puestos de calidad, fabricación, recursos humanos y dirección de la factoría, a los que hasta entonces no había llegado ninguna mujer, ha referido.

Ella se ha quedado con ese primer paso al que se atrevió a estar ahí, con su buzo y en un taller, cuando le preguntaron que si se atrevía a ello.

“Ésto se lo preguntas a un hombre?”, respondió ella entonces, aunque ha recalcado su suerte de estar en una empresa en la que “nunca se ha sentido discriminada”, en ningún momento, por ser mujer.

“Había más ojos mirándote”: No fracasabas tu, lo hacían todas las mujeres

“Ni de sueldo, ni por género”, ha incidido, aunque hace 35 años ha reconocido que se sentía un poco sola, ya que era la única mujer en estos entornos, y tenía “más ojos” mirando lo que hacía, se sentía un poco más vigilada, que “no discriminada”, por ser mujer.

En aquella época “tenías que demostrar algo más que los demás”, ya que quien fracasaba o lo hacía mal no era “Mª Paz, eran las mujeres”.

Ahora, la directora de Michelín España y Portugal cree que las mujeres lo tienen más fácil, y el tema género está superado en su empresa, todavía no en cuanto a número ya que tienen problemas para atraer a las mujeres a algunos procesos industriales.

Ahora si “alguien fracasa no es por ser mujer” sino por ser María o quien sea, ha explicado Robina, para quien una empresa “no puede perder la mitad del talento” que representan las mujeres en la sociedad.

Las mujeres: también clientes del mercado del motor

Las mujeres también se han transformado en clientes dentro del marcado de la automoción, bien posicionadas y con criterios claros, que además conducen autobuses y camiones y saben de motores.

Hace treinta años cuando ibas a comprar un vehículo te preguntaban de qué color lo querías, sin entrar en el tipo de motor o características del mismo, ha recordado.

Hay mujeres que diseñan no ya los exteriores sino los motores y los propios coches.

Falta poco para que las mujeres lleguen a las presidencias de las instituciones españolas

En cuanto a la falta de mujeres en responsabilidades como la presidencia del Gobierno, de un sindicato o un gran banco o que haya más frente de universidades a su juicio “falta poco” para ello.

“Yo creo que ya las mujeres ya estamos y en la mayoría de las empresas, en todos los niveles de los órganos decisionales, que tiene que ser bastante natural y hoy, bueno, ya vemos en los gobiernos más o menos paritarios. Yo creo que cualquiera que entrara ya tendría, porque las mujeres allí donde entran demuestran que pueden estar, saben estar y su talento es como el de los hombres ni más ni menos”.

“Yo creo que falta muy poco para que eso se dé”, ha añadido Robina, quien sobre las políticas positivas en igualdad ha valorado que más allá de las ayudas la visibilización que suponen y un impulso que aún “es necesario”, ha concluido.EFE